Nuestra movilidad y flexibilidad de movimiento son quizás la clave de nuestro éxito.
Estos son dos conceptos esenciales no solo para los deportistas, sino para la vida diaria de cualquier persona.
Se recomienda que la elección del calzado respete la anatomía del pie, utilizando materiales flexibles, ligeros y que permitan la transpiración (cuero, lona, tela), pero con suela rígida para favorecer el equilibrio.
Hay muchos marcadores que contribuyen a mejorar nuestra salud, bienestar y niveles de condición física, pero quizás ninguno se pasa tan por alto como el sueño.